en la pizca de algodón. Los fines de semana Ramon Ayala y su padre se dedicaban a cantar en las cantinas de los pueblos cercanos.

 

Para el año de 1959, el destino separa a Ramon Ayala de su padre, mientras su progenitor emprende un viaje a McAllen Texas, él permanece en Reynosa, es ahí donde conoce a Cornelio Reyna, cantante poseedor de una voz aguda y gutural muy característica; quien entonces alternaba con un amigo, Juan Peña actuando en la cantina "El Cadillac", presentándose como "Dueto Carta Blanca", inicialmente Ayala solicito trabajo como lustrador de zapatos, pero pronto se le permitió demostrar sus habilidades como acordeonista, al ser escuchado por ambos artistas es aceptado, al poco tiempo Juan se separó de Cornelio, quedando Ramon Ayala en su lugar, cambiando el nombre del dueto a "Los Relámpagos del Norte". Al igual que Ayala, Cornelio Reynatenía un modo de vida bastante humilde, solo poseía un pantalón remendado y Ramon Ayala tenía dos, y compartían sus alimentos bajo un árbol, teniendo como mesa un huacal (caja de madera) de Tomate. La dupla continuó sus andanzas, de cantina en cantina en busca de trabajo, no obstante, Cornelio ya había tenido la suerte de grabar un disco al lado de Juan, para Falcón Records, pero nada había sucedido. A base de insistente trabajo y esfuerzo consiguieron grabar hacia 1963 un tema que les ganaría notoriedad; "Ya no llores", grabado por Bego Records, sería la canción que les abriría las puertas al éxito. Los cuatro años de tropiezos habían quedado atrás, a esta seguirían "Comal y metate", "Ay ojitos", "La tinta de mi sangre", "Devolución", "Mi Tesoro", el dúo de jóvenes comienza a experimentar una arrolladora fama, inicialmente local y posteriormente a nivel nacional. Uno de los grandes méritos de Cornelio y Ramon Ayala fue el de ampliar el gusto musical por la música norteña en todo el país, como auténticos pioneros del movimiento grupero en México. Sin embargo, 1971 fue el año que marco la disolución del exitoso dueto, Cornelio emprende una carrera en solitario con un éxito relativo. Pese a que muchos críticos musicales señalaban el hecho como el fin de la trayectoria de Ramon Ayala, en vista a que sólo ejecutaba el acordeón, esto no fue así.

 

Un modesto empresario regiomontano y visionario del fenómeno musical norteño que tiempo atrás había fungido como representante de Los Relámpagos del Norte, decidió extenderle su apoyo. Tiempo después surgiría en el ámbito musical la agrupación Los Bravos del Norte, que firmó contrato con discos Marsol, un sello fonográfico estadounidense, lanzando sus primeras grabaciones de manera regular y con cierto éxito; en ese entonces se había incorporado Antonio Sauceda. DLV que los catapulta nuevamente al encontrar ahí siguientes éxitos: "Ni por mil puñados de oro" sería el primero. La cosecha de éxitos se da de manera espaciada pero constante, en 1974 Los Bravos del Norte reciben su primer disco de oro por su índice de ventas de la canción "Chaparra de mi amor", siendo también este el año en que debuta como vocalista de los Bravos el cantante Eliseo Robles. Los éxitos continúan hasta 1979, En 1986 reciben otro Disco de Oro y posteriormente un Disco de Platino. En 1988 Eliseo Robles deja a los Bravos del Norte para iniciar su propia carrera, ingresando a Los Bravos del Norte el vocalista Juan Antonio Coronado quien a pesar de las comparaciones logro imponer su estilo con los bravos grabando éxitos como La Rama del Mezquite, Para poder llegar a ti (Recibe otro disco de oro), tristes recuerdos, mi acordeón y yo y muchas más. Súper Éxitos de Ramón Ayala incluye: La rama del mezquite, La miedosa, Tragos amargos, Buenos días señor Dios, Cumbia del zoológico, entre muchos otros, para 1992 Juan Antonio Coronado deja a los Bravos y en su lugar Mario Marichalar hasta la fecha es el actual vocalista.